3. Suena muy fácil decir que tu mente debe liberarse de todas los obstáculos, pero la tarea es ARDUA. Cuando vas por primera vez al gimnasio sientes que tienes todo por hacer, te comparas con todos y te ves peor que cualquiera, Sin embargo DEBES COMENZAR. La mejor manera es proyectar aquello que sueñas en el ámbito familiar, de pareja, laboral y de descanso. Ten en mente la imagen de aquello que quieres lograr y elimina la palabra “imposible” de tu léxico. No dejes de PROYECTARTE, esa es la clave. Por más difícil que sea tu realidad, por más complicado que sea tu presente, nunca pares de proyectar tu vida allá donde quieres estar. Y un último consejo: no te compares jamás con nadie. De este tema hablaré en otra publicación ya que los efectos de compararse son devastadores. Jamás lo hagas con tus hijos, con tu pareja, con tus padres, amigos, y mucho menos contigo mismo. COMPARARSE es la cizaña de todos tus proyectos.