Disfruta del trópico y muéstrate sin complejos

En Colombia tenemos tantos paisajes y climas que puedes pasar de un calor extremo a un frío polar sin tener que gastar demasiadas millas de viajero.

A diferencia de otros países donde las estaciones están bien marcadas, en Colombia tenemos temperaturas más o menos estables durante todo el año, interrumpidas por las temporadas de lluvias y sequía.

Quien vive en una ciudad de clima frío usará chaquetas, pantalones, bufandas y pashminas, botas de caña alta y en general ropa que le permita mantenerse más abrigada. Esta ropa ofrece la gran ventaja de protegernos no sólo del clima sino también de los comentarios hirientes, pues al estar tan cubiertas evitamos mostrar nuestro cuerpo y nuestros complejos e inseguridades.

Finalmente usamos nuestra ropa como una barrera.

¿Qué sucede cuando cambia el clima o vives en una zona caliente? Tu estilo necesariamente debe adaptarse a esta realidad pues lo menos que querrás es sufrir un golpe de calor porque no puedes abandonar tu chaqueta de lana con forro interno.

La forma de vestir es un reflejo de lo que somos, por ello hay una estrecha relación entre ella y lo queremos que los demás sepan de nosotros.

Algunas personas pasan media vida “escondiéndose” de los demás y aunque estén a 40 grados usan ropa gruesa, con mangas largas, simple o anticuada, y un largo etc. Es decir, algo que no es para nada cómodo ni coherente con su realidad y todo porque odian sus brazos o no pueden lidiar con la pancita.

Lo peor es que estos complejos e inseguridades son el resultado del culto a los cánones irreales de belleza, los mensajes negativos que te dices cada día, prejuicios, etc. Al final terminas con una visión totalmente distorsionada de ti misma.

¿No quisieras vivir libre de complejos y poder mostrarte al mundo tal como eres? Eres una persona maravillosa y valiosa, los estereotipos los impone la sociedad y varían según las tendencias, por lo tanto no existe algo como cuerpo o proporciones perfectas. Y lo más importante: tus características físicas no definen quien eres como persona.

Nuestro ambiente tropical merece ser vivido y disfrutado a plenitud pues somos privilegiados de poder estar aquí. Y nuestro cuerpo merece ser celebrado porque es fuente de vida, nos permite hacer todo lo que queramos, es el templo que guarda nuestra alma y que nos va a acompañar toda la vida.

¿Por dónde puedes empezar? Por aceptarte a ti misma, con tu luz y tus sombras, haz las paces con tu ser y perdónate por tus errores. Un buen ejercicio es mirarte todos los días en el espejo, sin juzgarte, simplemente mírate y di en voz alta cosas bonitas sobre ti, recuérdate tus logros y premios alcanzados, reconoce tus rasgos favoritos  y agradece los que menos te gustan pues el conjunto completo es lo que te hace única y diferente.

¿Sabías que lo que eres por dentro, se refleja por fuera? Y mientras más te aceptes y te gustes, más atraerás a los demás (y no hablo sólo en el aspecto romántico sino a nivel general). La ropa es más que vanidad, tu estilo personal es una herramienta que puede ayudarte a lograr tus metas.

Para superar la aversión a ciertas prendas lo mejor es incorporarlas a tu guardarropa de diario y usar una sola prenda en tus outfits, no varias al mismo tiempo, aquí hay que dar pasitos de bebé (podemos ayudarte con este proceso, consulta nuestros servicios en Asesoría de Imagen aquí).

En el trópico y durante los días de buen tiempo todo luce más colorido y fresco, es una temática espectacular para incorporar en tu estilo y así atraer el positivismo y la buena vibra, sobre todo en estos tiempos tan inciertos.

Sin embargo no tienes que lucir como Carmen Miranda ni disfrazarte de cualquier estereotipo latino, basta con agregar algunos toques de color o un poco de estampado cerca del rostro para atraer la atención hacia tu cara y así te miren directo a los ojos (¿aún no sabes qué colores te favoren? Descubre aquí nuestro curso online de colorimetría).

Mostrar un poco de piel es super favorecedor pues siempre que se haga de forma moderada (sin ser vulgar), podrás lucir más estilizada. La idea es hacerlo manteniendo el equilibrio del outfit completo y analizando las zonas que puedes mostrar sin sentirte expuesta o con complejos (por ejemplo, los hombros o las pantorrillas).

 

Ya que tu cuerpo es tu casa, dale el trato que se merece, después de todo lo que hace a diario por ti, es lo mínimo que puedes hacer por él.